martes, 17 de mayo de 2011

Ahí vas... Con tu paquetito de ambiciones personales. Con tus altísimos y pesados ideales. Con un sueño atragantado con olor a naftalina. Ahí vas... Con tus amores fugaces Con tus amantes truncos Con tus abrazos de espuma. Ahi vas... Con tus palabritas esdrújulas. Con tus libros parlantes. Con tus frases de ocasión. Ahí vas... Con tu sonrisa indadjetivada. Con tu distancia demasiada. Con tu vaivén vaivén vaivén. Ahí vas... Con tu pasado punzante. Con tu presente vertiginoso. Con tu futuro de vapor. Ahí vas... Con tu carcajada de lágrimas. Con tu caricia diplomada. Con tu silencio estruendoso. Ahí vas... Con tus contradicciones. Con tus certezas. Con tus dudas. Ahí vas... Ahí vas... Sólo Dios sabe a dónde. Y Dios quiera que el camino pase por mí.

No hay comentarios: